Los triunfos contra Godoy Cruz y Vélez hicieron ilusionar a todo Vicente López. Los jugadores lo sienten y también los hinchas, que se encargaron de copar la cancha para darle un marco especial al encuentro ante Gimnasia. Y con la moral bien alta, Platense logró un buen empate: se recuperó de un 0-1 y rescató un gran resultado para mantener el invicto y alcanzar a Estudiantes y Newell ‘s en lo más alto del Torneo de la Liga Profesional (cosecha 7 sobre 9).
A diferencia de las primeras dos jornadas del campeonato, De Felippe metió mano en el equipo pese al invicto y a los buenos rendimientos que mostró. El entrenador planteó una línea de tres defensores para ganar en seguridad, altura y hacerse ancho en la última línea para evitar sufrir con la velocidad de Carbonero y de Ramón Sosa. Y vaya que le rindió, ya que al Lobo le costó muchísimo llegar con peligro al arco rival.
Entonces el primer tiempo comenzó con Platense esperando en su propio campo y con Gimnasia manejando la pelota en campo rival. Más allá de tener el balón, el Lobo no logró generar situaciones claras de gol y con el paso de los minutos el Calamar se fue acomodando en el campo de juego. No tuvieron situaciones claras de gol en los primeros 45 minutos y se fueron al descanso 0-0.
Y esto se extendió al segundo tiempo, cuando ambos equipos sostuvieron a pie firme sus posturas y no resignaron sus posibilidades de quedarse con los tres puntos, aun a despecho de cerrar la noche con las manos vacías. Promediando la etapa final, Gimnasia parecía ver recortadas esas chances cuando se retiró lesionado Cristian Tarragona, reemplazado por Franco Soldano, que no tiene la misma impronta que el ex-Platense.
Y por contrapartida Platense buscó con un ex Gimnasia como Horacio Tijanovich reflejarse en su rival en cuanto a lo que aportaba Carbonero, que por cierto fue bastante poco, al punto que después de la media hora fue relevado. Y a los dos minutos de ingresar a la cancha, Chávez respaldó la visión de su entrenador al convertir el gol del Lobo desde el borde derecho del área con un impecable zurdazo cruzado a media altura. Por eso Gorosito se golpeó el pecho, y aplaudió al goleador de 21 años mientras le manifestaba a su ayudante de campo, Gustavo Zapata: “te dije, te dije…”.
Sin embargo Platense parece haber alcanzado un cierto nivel de madurez, y ya sin Mauro Zárate en cancha, luego de una actuación menos que discreta, llegó rápidamente al empate con un golazo de otro jugador llegado desde el banco de suplentes, también de 21 años: Juan Cruz Esquivel. El futbolista que llegó desde Talleres, de Córdoba, en su vigésimo partido con la camiseta calamar anotó un gran gol con un remate cruzado de derecha tras una excelente diagonal por la izquierda en la que dejó en el camino a tres rivales a puro amague.
Este fue el primer tanto de Esquivel en el equipo de Vicente López y terminó por dejar conformes a los hinchas locales, que creían todo perdido un par de minutos antes.
Ver articulo completo en : www.donadoholmberg.com.ar.com.ar