Fuente: Periódico Voces de la Comuna 15 (Por Ezequiel Semo)
La Paternal tiene una rica historia ligada a la industria textil. De lo artesanal a lo industrial en sus calles se instalaron sastres, modistas y pantaloneros, talleres de confección, fabricas de guantes y camisas, tintorerías y talleres de planchado. Aún hoy existen fábricas textiles, talleres de confección, comercios donde se hacen arreglos de ropa y también la sastrería Selim.
Etiquetas para prendas finalizadas. Dos épocas: primero llamada Asin, ubicada en M.A. Rodriguez 2752 y luego Selim, en Gral. Artigas 2208. Este último nombre es el que aún conserva.
Este 15 de diciembre Selim Asin cumplió 93 años. Y no es un dato menor. Este sastre sigue trabajando todos los días en su negocio de la Avenida San Martín. Acompáñenme a este mundo de hilos, agujas y pesadas tijeras, brillosos y abollados dedales, perchas e historia. Daremos un viaje por la que tal vez sea, la última sastrería del barrio.
Selim nacíó el 15 de diciembre de 1928 en Villa Sanz, un pueblito ubicado en el partido de Bolívar, provincia de Buenos Aires. Hijo de Selim Asin, un inmigrante libanes, y de Isabel Aranda, una criolla, es el menor de once hermanos: cinco mujeres y seis varones. Lo textil en su familia, al parecer, estuvo presente: su padre se había iniciado en el comercio recorriendo los parajes de Bolívar vendiendo ropa que llevaba en un paquete al hombro, el progreso le permitió comprar un charrete al que le añadió un techo con lona para que la mercadería se protegiera en los días de lluvia. Luego instaló un gran almacén de ramos generales en Villa Sanz, que también contaba con habitaciones para hospedaje, bar y billares. Posteriormente la familia se muda a Henderson (Partido de Hipólito Yrigoyen) donde su padre abrió otro almacén. Selim clava sus ojos grises en el horizonte próximo de la sastrería y recuerda las calles de arena de Henderson, la visita a la estación ferroviaria y el paso de los trenes del Ferrocarril Midland que desde la estación Puente Alsina (Lanús) a Carhué, trasladaban a miles de pasajeros que iban en busca de las mágicas aguas de la laguna Epecuén.
Selim Asin e Isabel Aranda posan junto a sus hijas, hijos y sobrinos en la galería de la vivienda de Villa Sanz . Selim (padre) está sentado y Selim(hijo) se apoya en él. Archivo familiar Asin. Digitalización: Ezequiel Semo
Las décadas del treinta y cuarenta del siglo pasado estuvieron marcadas por la crisis económica mundial del 29/30, que produjo en nuestro país la caída de exportaciones de productos agrícolas y el proceso de sustitución de importaciones que generó la instalación de muchísimas fábricas en los grandes centros urbanos, dándose como consecuencia el desplazamiento de habitantes de las zonas rurales hacia las urbes en busca de un mejor pasar económico. Este despoblamiento del campo impactó en la economía del comercio de la familia Asin – Aranda. Es así que alrededor del año 1945 el grupo familiar deja Henderson para instalarse en el barrio de La Paternal. Selim (padre) compró un almacén con vivienda ubicado en la esquina de Manuel A. Rodríguez (En ese entonces Sapaleri) y el pasaje Bella Vista. El edificio aún está en pie.
Selim trabaja en su mesa de corte. 12 de diciembre de 2019. Foto: Ezequiel Semo
En Henderson, Selim (hijo) se había iniciado en el oficio del corte y la confección trabajando en la sastrería Martínez y García. Una vez en La Paternal, y contando con esta experiencia, ingresa a la sastrería del señor Franchino, ubicada en Avenida San Martín 3250. Allí estuvo solo tres meses. Luego trabaja en La clínica de los trajes, ubicada frente al hospital Durand. Después de un tiempo, Gabino Barberis, un sastre compañero de esta tienda, lo invita a trabajar en su flamante sastrería Barberis, emplazada en Cucha Cucha y Jonte: acá si agarré al vuelo el aprendizaje completo. Cortar, probar y confeccionar. Yo tenía que saber bien. Dice Selim.
Herramientas de trabajo. El jarrito metálico lo acompaña desde la conscripción. Foto: Ezequiel Semo
Entre 1948 y 1950 hace la conscripción en la compañía VI de construcciones, en Ciudadela, prestando servicio en la sastrería de dicho regimiento. Los arreglos de prendas y la provisión de uniformes a la tropa eran algunas de las tareas que realizó en este período. En los ratos libres confeccionó un traje con chaleco para su padre. Sería el primero y último que le haría. Selim(Padre) lo vistió el día que partió del puerto para retornar a su Libano natal, debía vender una propiedad familiar y retornar a la Argentina junto a una hermana que había quedado allí. Nunca pudo ser, falleció en aquel país árabe.
Repisa con distintos botones. Foto: Ezequiel Semo
Al salir del ejército abre su propia sastrería llamada Asin en un sector del almacén familiar que contaba con vidrieras, en la esquina de Manuel A. Rodríguez y Bella Vista. La demanda de los clientes era importantísima en esos años: llegue a tener cuarenta trajes para hacer, imagínate que la gente iba con traje a la cancha a ver los partidos. Había mucho trabajo, los obreros cuando cobraban el aguinaldo se hacían un traje.
Una vez casados se mudan junto a su primera señora al barrio de Mataderos, allí residió y trabajó por veinte años hasta que vuelve a La Paternal, instalándose en Artigas 2208. Eran muchos los sastres en el barrio, solo por Jonte, hacia Nazca, tenias como diez, recuerda. Entonces yo le nombro a Brynkier en Jonte 2155-59 (Tengo una percha de madera que perteneció a mi abuela Lola), y menciona a la sastrería Taylor. En 1973 muda su sastrería a la Avenida San Martín 3482 y cambia el nombre Asin por Selim. Ya en el año 2013 yo conocí la sastrería de Selim ubicada en Álvarez Jonte 1855. Hace ya algunos años que atiende su negocio en Avenida San Martín 3254.
Una de las cosas que sorprende y alegra es cruzarlo por la calle, ágil, siempre con paso ligero y su excelente percha (Postura) que venció a la figura encorvada con la que en general termina quien trabajó tantos años frente a la máquina de coser. Selim está trabajando en un pantalón que apoya en su falda, me mira y afirma que el secreto está en sentarse en una silla que sea alta y dura y siempre estar atento para corregir la postura posicionándose siempre derecho, abre el pecho y tira los hombros para atrás.
Ingreso a su local y rememoro los rincones de la sastrería Semo, atendida por mi abuela Juana, que era Modista fina y mi abuelo Alberto Semo, que era sastre. El probador, la cortina y su espejo, la fría luz de tubo blanco que tiñe todo, los frascos con dispares botones, las típicas mesas de madera para corte, planchas, reglas y escuadras de madera, tizas para tela y cintas para medir, una infaltable máquina de coser y las prendas finalizadas colgadas, quietas, esperando ser retiradas en el salón.
Selim junto a su fiel máquina Singer, apodada Cabeza de chancho.Trabaja con ella desde el año 1960. Foto: Ezequiel Semo
Ezequiel Semo es artista visual, investigador, vecino de La Paternal y fundador del Archivo Textil Ferroviario. Lo encuentran en las redes: Ezequiel Semo en FB e IG y No demuelan la estación La paternal en FB. Contacto: ezequielsemo@gmail.com