La plaza Rubén Darío, que anteriormente llevaba el nombre de “Plaza Justo José de Urquiza”, nombre que fue cambiado por la ordenanza 51.924 del 28 de agosto de 1997, se encuentra entre las Avenidas Libertador, Presidente Figueroa Alcorta y Pueyrredón, además de la calle Austria, en el barrio de Recoleta.
La plaza lleva el nombre del poeta y diplomático nicaragüense, además del monumento “Canto a la Argentina”, el cual está dedicado al poeta Rubén Darío, autor de múltiples obras como “Azul”, “Prosas profanas”, “Cantos de Vida y Esperanza”, “Poema del Otoño”, “Viaje a Nicaragua e intermezzo tropical”, y “Canto a la Argentina”. Rubén Darío, cuyo nombre en realidad es Félix Rubén García Sarmiento, fue el representante más importante del modernismo literario en la lengua española, y es frecuentemente llamado el “príncipe de las letras castellanas”.
El modernismo literario es un movimiento que se desarrolló entre los años de 1880 y 1917, principalmente en la poesía, caracterizado por una ambigua rebeldía creative, un refinamiento narcisista y aristocrático, el culturalismo literario y una profunda renovación estética del lenguaje y la métrica. En Argentina, algunos de los modernistas más reconocidos fueron Leopolde Lugones y Enrique Larreta.
Rubén Darío nació el 18 de enero de 1867, y fue el primer hijo de Manuel García y Rosa Sarmiento. Rosa, al estar embarazada, abandonó a Manuel por su consumo de alcohol y sus infidelidades, yendo a la ciudad de Metapa, donde dio luz a Rubén. La pareja sin embargo se reconcilió y tuvieron otra hija, Cándida Rosa, quien desafortunadamente murió a los pocos días de su nacimiento. Luego de este hecho, la relación volvió a deteriorarse, y Rosa se fue acompañada de Rubén a la casa de su tía, en León, donde conoció a otro hombre y se fue a vivir con él en San Marcos de Colón, en Honduras.
La niñez de Rubén tomó lugar principalmente en León, la ciudad en la que nació, criado por sus tíos abuelos. No tuvo mucho contacto con su madre, ni con su padre. Asistió a varias escuelas de la ciudad, antes de educarse con los jesuitas. El niño era un prodigio, sabía leer a los tres años. Sus primeras lecturas fueron el Quijote, las obras de Moratín, Las mil y una noches, la Biblia, los Oficios de Cicerón, y la Corina de Madame de Staël. No mucho más tarde empezó a escribir sus primeros versos, y publicó por primera vez una elegía en un periódico a los 13 años. Llegó a alcanzar fama como “poeta niño”, con influencias de poetas como Zorrilla, Campoamor, Núñez de Arce y Ventura de la Vega. Más adelante, mostraría un gran interés por Victor Hugo, quien se convertiría en una gran influencia en su trabajo. A los 14 años, ya pensaba en publicar su primer libro, “Poesías y artículos en prosa”, el cual no vería la luz del día hasta los 50 años después de su muerte. Se decía que tenía una memoria superdotada, y que contaba con una creatividad increíble.
Durante su adolescencia y juventud pasó por muchas naciones después de llamar la atención de varios diplomáticos y personas de suma relevancia cultural e intelectual. Pasó por El Salvador, por Chile, donde vivió en la pobreza, pero aun así logró publicar su primer libro de poemas “Abrojos” y donde también logró publicar “Azul…”. También pasó por Perú, Guatemala, Costa Rica, Cuba, España, Panamá, los Estados Unidos, Francia y Argentina. En Buenos Aires, publicó dos libros sumamente relevantes para su obra, “Los raros”, y “Prosas profanas y otros poemas”.
En uno de sus viajes a España, conoció a Francisca Sánchez del Pozo, quien se convertiría en su esposa y el gran amor de su vida. Rubén tuvo tres hijos con Francisca, pero desafortunadamente solo uno de ellos sobrevivió, Rubén Darío Sánchez, apodado “Güicho”. En sus últimos años, Rubén pasó de vuelta por parís, donde escribió nuevos libros, mientras lidiaba con problemas ya muy severos con el alcoholismo, el cual afectaba su salud y su psiquis, causándole varias crisis psicológicas. Llegó a intentar suicidarse, y luego de unos años, escribió “Canto a la Argentina y otros poemas”, mientras su situación no paraba de empeorar, hasta que el 6 de febrero de 1916 murió en León, la ciudad de su infancia.txt: Max D
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